Uno no muere por sufrimiento sino por querer evitarlo
Cuando una persona sufre, suele invertir todas sus energías y esfuerzos en terminar con la fuente de dolor. Este esfuerzo normalmente le aleja de lo que es importante en su vida. Empieza entonces a sobrevivir, dejando, al mismo tiempo, de vivir.
El sufrimiento emocional intenso, junto al sentimiento de no ser entendido por los demás, es una de las experiencias más dolorosas a nivel psicológico que la persona puede experimentar. Este sufrimiento puede tener muchos nombres: ansiedad, depresión, anhelo, dolor físico, obsesión, impulso incontrolable, miedo…
Aunque los nombres del dolor cambien, el trasfondo es parecido. Son vivencias emocionales desagradables que invaden y paralizan...