AgustinCasas
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Llevo desde principios de año intentando dejar las benzodiacepinas. Mi psiquiatra advirtió que llevo muchos años tomándolas y, evidentemente, se ha producido no sólo dependencia sino tolerancia. Traté de convencerla de que era mal momento, una recién rota relación de cerca de diez años que no consigo superar, pero no cedió. Su plan, sustituir las tres pastillas diarias por otro compuesto de diferente especie que también actúa a través de los receptores gaba. La estrategia es sencilla: tomar las nuevas e ir aumentando la dosis y, cuando sienta somnolencia, dejar las antiguas. Allá que voy.
Pero las nuevas causan vértigo, debilidad, sensación de irrealidad, mareo, indisposición y mal estado general. Ha habido veces que he terminado de cuatro patas en medio de la calle porque pensaba que me derrumbaba. Pero lo peor está todavía por llegar. Tres o cuatro semanas y empieza un dolor exageradamente intenso en el estómago. No ha bastado encontrarme mal, ahora me retuerzo de dolor literalmente. Llamo al CSMA pero no responden. Mi ánimo, que ya estaba bajo mínimos, es ahora inexistente y con rumiaciones pesimistas. No puedo continuar así. Dejo el tratamiento alternativo. Sigo con los ansiolíticos que ya no me hacen apenas efecto.
Tardo casi un mes en recuperarme (y no del todo) de la debilidad y los vértigos. Un mes tomando doble dosis de omeprazol para recuperarme del estómago. Al sentirme mejor me decido a intentar dejar la mitad de los ansiolíticos. Ahora tomo tres mitades al día. Lo soporto. La ansiedad basal que padezco es elevada. Me obstino y persevero.
Pasa más de un mes y decido volver a dividir la toma de las benzodiacepinas. Ahora tomo tres cuartas partes al día. Tres semanas así y tengo visita con mi psiquiatra. Me viene a decir que la dosis que tomo es como no tomar nada. Me felicita. Pareciera que el enorme esfuerzo que he hecho tenía sentido.
No me estoy dando cuenta de nada. Como por ansiedad. Fumo por ansiedad. Bebo por ansiedad. Joder, de entre mi amalgama de trastornos está el de ansiedad generalizada. No tengo ni puta idea de como regular la ansiedad. Nunca he sabido. Nunca me han enseñado, nunca me ha atendido una psicóloga con intenciones terapéuticas. ¿Se supone que ahora tengo que malvivir esclavo de mis estrategias de mierda? ¿Hartándome de comer? ¿Emborrachándome para sentir algo de euforia, por un par de horas, a cambio de una resaca de cuatro días? ¿Consumiendo hierba? ¿O bien no haciendo nada y conviviendo con las ganas de darle una patada a la puta vida? Sin conseguir emocionarme, sin un momento de tranquilidad y menos de concentración, sólo rayado, sólo crispado, sólo cabreado con todo. ¿Vivir sólo es sobrevivir?
El lunes tengo visita y no sé cómo pedirle que me ayude.
Pero las nuevas causan vértigo, debilidad, sensación de irrealidad, mareo, indisposición y mal estado general. Ha habido veces que he terminado de cuatro patas en medio de la calle porque pensaba que me derrumbaba. Pero lo peor está todavía por llegar. Tres o cuatro semanas y empieza un dolor exageradamente intenso en el estómago. No ha bastado encontrarme mal, ahora me retuerzo de dolor literalmente. Llamo al CSMA pero no responden. Mi ánimo, que ya estaba bajo mínimos, es ahora inexistente y con rumiaciones pesimistas. No puedo continuar así. Dejo el tratamiento alternativo. Sigo con los ansiolíticos que ya no me hacen apenas efecto.
Tardo casi un mes en recuperarme (y no del todo) de la debilidad y los vértigos. Un mes tomando doble dosis de omeprazol para recuperarme del estómago. Al sentirme mejor me decido a intentar dejar la mitad de los ansiolíticos. Ahora tomo tres mitades al día. Lo soporto. La ansiedad basal que padezco es elevada. Me obstino y persevero.
Pasa más de un mes y decido volver a dividir la toma de las benzodiacepinas. Ahora tomo tres cuartas partes al día. Tres semanas así y tengo visita con mi psiquiatra. Me viene a decir que la dosis que tomo es como no tomar nada. Me felicita. Pareciera que el enorme esfuerzo que he hecho tenía sentido.
No me estoy dando cuenta de nada. Como por ansiedad. Fumo por ansiedad. Bebo por ansiedad. Joder, de entre mi amalgama de trastornos está el de ansiedad generalizada. No tengo ni puta idea de como regular la ansiedad. Nunca he sabido. Nunca me han enseñado, nunca me ha atendido una psicóloga con intenciones terapéuticas. ¿Se supone que ahora tengo que malvivir esclavo de mis estrategias de mierda? ¿Hartándome de comer? ¿Emborrachándome para sentir algo de euforia, por un par de horas, a cambio de una resaca de cuatro días? ¿Consumiendo hierba? ¿O bien no haciendo nada y conviviendo con las ganas de darle una patada a la puta vida? Sin conseguir emocionarme, sin un momento de tranquilidad y menos de concentración, sólo rayado, sólo crispado, sólo cabreado con todo. ¿Vivir sólo es sobrevivir?
El lunes tengo visita y no sé cómo pedirle que me ayude.