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Usuario poco activo
Me gustaría dejaros una carta que me he escrito yo a mí misma, para aquellos días malos en los que no sé cómo salir de mis pensamientos negativos poder animarme. He pensado en ponérmela por casa en un corcho para poder leerla siempre que lo necesite o se me olviden las cosas importantes. Os la dejo a vosotros por si pudiese servir de ayuda a alguien más, ya me diréis qué os parece la idea. Estaré encantada de saberlo. Un beso a todas/os y mucho ánimo.
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Hola, probablemente si estás leyendo esto es porque hoy estás en uno de esos días donde no existen los colores, ni las escalas de grises, donde todo es blanco o negro, todo o nada y no hay cavidad para nada más.
Seguramente hoy creas que es el final de muchas cosas, que la vida es cruel, que mereces todo lo que te pasa, que es mejor que te quedes sola, pues es el destino que te espera, ya que no existe un lugar para ti y por lo menos de esa manera, sólo te harás daño a ti misma y no a los demás que tengas cerca.
Y entonces serás consciente de la rabia que hay dentro de ti, de tus deseos constantes de que te pase algo malo y de la frustración que sientes por no ser capaz de hacerte daño físico mientras fantaseas con ello. Sin darte apenas cuenta, habrás dejado de llevar un orden de comidas, de hacer ejercicio, de arreglarte, de salir a la calle, de hablar con gente y relacionarte o simplemente de cuidarte para buscar de esa manera tu autocastigo.
Pero el mayor dolor que sientes dentro, vendrá reforzado por la sensación de no sentirte querida, por la sensación de abandono, de pérdida de lo querido, de no saber cómo arreglar las cosas. Reforzarás tus reflexiones recordando que no crees en las relaciones a medias, que no puedes confiar en los demás y que esperas cosas que nunca llegarán. Utilizarás ágilmente las palabras con los demás con una verdad hiriente, dañando sus puntos débiles, sin darte cuenta que las peores palabras te las estás diciendo tú sola a ti misma en cada uno de tus pensamientos.
Finalmente sentirás miedo de saber que has vuelto a desbordarte, a fallarte por no ser capaz de controlar todo esto que te pasa, que tus esfuerzos no sirven de nada, porque todo lleva al mismo sitio… a estar sola; pues probablemente ya hayas desgastado a los pocos que quedan a tu alrededor. Y entonces te preguntarás, ¿porqué lo haces?, ¿porqué no puedes ser normal?, ¿cómo dentro de tu cordura puede existir tanta locura?, ¿quién puede ayudarte?
Pues bien, quizás no puedas ahora ver más de ahí, pero relájate porque probablemente mañana o dentro de unas horas te darás cuenta que no es todo o nada y buscar un punto medio, donde todo puede tener solución y si no la tiene, no entres en pánico, a veces hay que cerrar puertas para que se abran otras nuevas y no tienen porqué ser malas sino distintas.
No pienses que no existe un lugar para ti, pues seguramente ya lo hayas encontrado y quizás no te estés permitiendo disfrutarlo. El futuro se lo labra cada uno y aferrarte a lo pasado sólo ralentiza tus avances.
Haz por no descuidarte y evitarás sentirte más desbordada. Sal a la calle, camina, haz deporte o distráete con alguien, cualquier cosa que anule los malos pensamientos.
Recuerda que nunca se está sólo del todo, siempre hay alguien en algún rincón a quien le importa lo que te pase y seguramente aquella persona que crees que te está abandonando hoy simplemente no sabe como acercarse a ti, no los culpes, esto tampoco es fácil para ellos. No olvides todo lo que os une, todo lo que eres capaz de dar y lo que te dan, los besos, las caricias y los buenos momentos vividos, que aunque ahora no los veas no quiere decir que no existan , seguro que mañana los recordarás y valorarás mejor. La vida es más llevadera si se disfruta en compañía, no alejes a la gente de tu lado. Sólo te harás daño a ti misma y no lo mereces.
No sentencies nada, espera dos días, quizás en frío veas las cosas de otra manera. No te escondas y haz por solucionarlo, pero respetando los espacios de los demás. Esto no ratifica que las cosas se arreglen, pero evitará que vayan a peor.
Lamento decirte que no puedo garantizarte que no habrá una próxima crisis pero sigue buscando herramientas que te ayuden, pues lo que nunca debe desaparecer son tus ganas de salir de esto.
Firmado, tu yo en calma.
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Hola, probablemente si estás leyendo esto es porque hoy estás en uno de esos días donde no existen los colores, ni las escalas de grises, donde todo es blanco o negro, todo o nada y no hay cavidad para nada más.
Seguramente hoy creas que es el final de muchas cosas, que la vida es cruel, que mereces todo lo que te pasa, que es mejor que te quedes sola, pues es el destino que te espera, ya que no existe un lugar para ti y por lo menos de esa manera, sólo te harás daño a ti misma y no a los demás que tengas cerca.
Y entonces serás consciente de la rabia que hay dentro de ti, de tus deseos constantes de que te pase algo malo y de la frustración que sientes por no ser capaz de hacerte daño físico mientras fantaseas con ello. Sin darte apenas cuenta, habrás dejado de llevar un orden de comidas, de hacer ejercicio, de arreglarte, de salir a la calle, de hablar con gente y relacionarte o simplemente de cuidarte para buscar de esa manera tu autocastigo.
Pero el mayor dolor que sientes dentro, vendrá reforzado por la sensación de no sentirte querida, por la sensación de abandono, de pérdida de lo querido, de no saber cómo arreglar las cosas. Reforzarás tus reflexiones recordando que no crees en las relaciones a medias, que no puedes confiar en los demás y que esperas cosas que nunca llegarán. Utilizarás ágilmente las palabras con los demás con una verdad hiriente, dañando sus puntos débiles, sin darte cuenta que las peores palabras te las estás diciendo tú sola a ti misma en cada uno de tus pensamientos.
Finalmente sentirás miedo de saber que has vuelto a desbordarte, a fallarte por no ser capaz de controlar todo esto que te pasa, que tus esfuerzos no sirven de nada, porque todo lleva al mismo sitio… a estar sola; pues probablemente ya hayas desgastado a los pocos que quedan a tu alrededor. Y entonces te preguntarás, ¿porqué lo haces?, ¿porqué no puedes ser normal?, ¿cómo dentro de tu cordura puede existir tanta locura?, ¿quién puede ayudarte?
Pues bien, quizás no puedas ahora ver más de ahí, pero relájate porque probablemente mañana o dentro de unas horas te darás cuenta que no es todo o nada y buscar un punto medio, donde todo puede tener solución y si no la tiene, no entres en pánico, a veces hay que cerrar puertas para que se abran otras nuevas y no tienen porqué ser malas sino distintas.
No pienses que no existe un lugar para ti, pues seguramente ya lo hayas encontrado y quizás no te estés permitiendo disfrutarlo. El futuro se lo labra cada uno y aferrarte a lo pasado sólo ralentiza tus avances.
Haz por no descuidarte y evitarás sentirte más desbordada. Sal a la calle, camina, haz deporte o distráete con alguien, cualquier cosa que anule los malos pensamientos.
Recuerda que nunca se está sólo del todo, siempre hay alguien en algún rincón a quien le importa lo que te pase y seguramente aquella persona que crees que te está abandonando hoy simplemente no sabe como acercarse a ti, no los culpes, esto tampoco es fácil para ellos. No olvides todo lo que os une, todo lo que eres capaz de dar y lo que te dan, los besos, las caricias y los buenos momentos vividos, que aunque ahora no los veas no quiere decir que no existan , seguro que mañana los recordarás y valorarás mejor. La vida es más llevadera si se disfruta en compañía, no alejes a la gente de tu lado. Sólo te harás daño a ti misma y no lo mereces.
No sentencies nada, espera dos días, quizás en frío veas las cosas de otra manera. No te escondas y haz por solucionarlo, pero respetando los espacios de los demás. Esto no ratifica que las cosas se arreglen, pero evitará que vayan a peor.
Lamento decirte que no puedo garantizarte que no habrá una próxima crisis pero sigue buscando herramientas que te ayuden, pues lo que nunca debe desaparecer son tus ganas de salir de esto.
Firmado, tu yo en calma.
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